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DownloadExisten cuatro leyes fundamentales de la naturaleza. Estas leyes existen independientemente de que uno crea o no. Simplemente están ahí y son evidentes aun para personas que tengan una formación instructiva básica. Una de ellas y la más conocida es la gravedad.
Otras leyes que nos rigen son el electromagnetismo, conformado por dos fuerzas interdependientes como las dos caras de una moneda, el magnetismo y la electricidad, pero que a la vez son indisolubles.
Estos campos magnéticos y eléctricos aunque no perceptibles a simple vista, nos influencian y determinan un equilibrio en nuestra naturaleza física y orgánica.
Las otras leyes fundamentales de la naturaleza, son: la fuerza fuerte y fuerza débil. La primera que mantiene atados los protones en el núcleo del átomo está cargado electro positivamente; y la ultima la fuerza débil, que hace referencia a la radiación.
Para entender mejor estos conceptos y hacerlos comprensibles, la fuerza de la gravedad es igual a uno; la fuerza electromagnética es cien veces la fuerza de la gravedad. Y la fuerza fuerte en el núcleo atómico es igual a cien mil veces la fuerza de la gravedad.
Por otro lado el cuerpo humano funciona en base a las leyes de la electricidad, el sistema nervioso debe transmitir las señales y estás son de tipo electroquímico, y la misma célula Posee en su membrana un intercambio iónico denominado bomba de sodio potasio. Los científicos han investigado y finalmente establecido que están sujetas a leyes como la conductividad eléctrica, la capacitancia y la resistibilidad. Sé que son definiciones y conceptos que demanda abstracción.
La medicina convencional conoce estos temas en especialidad como la neurología, por eso se hacen los electroencefalogramas, o cardiología, el electrocardiograma.
Con todo este soporte, podemos entender que la aplicación de imanes pasivos, utilizados en biomagnetismo va a influir y generar cambios en los fluidos y estructuras de los organismos vivos.
El hecho de la curación depende de varios factores. Entre ellos dos fundamentales, la conducta alimenticia del paciente y la segunda igualmente importante, la actitud del paciente sobre sí mismo y el entorno.
Poseemos un sistema inmune muy poderoso expresado en estructuras sanguíneas; glóbulos rojos, que acarrean nutrientes oxígeno; plaquetas, que cierran nuestras heridas en caso de accidente; neutrófilos que nos defienden de bacterias, eosinofilos de virus, linfocitos, glóbulos blancos etc. Cada uno específicamente dedicado a una labor en el organismo.
El terapeuta apoya y orienta el hecho de la curación, pero esta finalmente es realizada por el mismo organismo. Como lo señalo dependiendo del apoyo del mismo paciente a sí mismo.
Puede haber un incremento de la sintomatología, llámese dolor, picor, ardor. Pero luego los pacientes hasta lo olvidan cuando se les vuelve a preguntar.
Lo más extremo, una gripe o cuadro respiratorio o diarrea, estas se producen porque el organismo está eliminando toxinas. Siempre recomiendo y advierto que pueden haber cambios leves o severos pero que serán temporales.
La primera y no como terapia, la alimentación. Así cumpliríamos la recomendación hipocrática de la medicina, “que tu alimento sea tu medicina y que tu medicina sea tu alimento” Pero lo olvidamos hace rato.
Respecto a las otras existen en la actualidad incontables posibilidades terapéuticas y de gran efectividad y acierto. Obviamente hay la Acupuntura milenaria de la China, y a partir de esta, la electro acupuntura, digito presión, terapia neural, etc.
En medicina hemos satanizado los microorganismos, pero esto no es así. El 10% de nuestro cuerpo son células (diez billones) y el 90% de nuestro cuerpo son microorganismos (aproximadamente 2 kilos, noventa billones). No tendríamos viabilidad biológica sin esta comunidad. No olvidemos que nosotros ingerimos, pero no digerimos. Esta labor le corresponde a nuestras bacterias, a las buenas.
Pero volviendo sobre el “terreno Biológico” si este tiene un pH alterado, los procesos de oxidación y reducción no están dentro de los parámetros de lo saludable. Para mi entender es un tema de poblaciones de microorganismos. Estos siempre van a estar aquí, pero su población está controlada en un cuerpo en equilibrio. Con un sistema inmunológico fuerte, mantendrá estas poblaciones bajo control.